Hola amig@s,
la palabra fotografía proviene de los términos «phos» y «grafé» que significan respectivamente «luz» y «escritura o conjunto de líneas». Habitualmente se dice que la fotografía es el arte de «pintar con luz», algo que puso de moda Salvador Dalí hace algunos añitos, aunque algunos fotógrafos habían experimentado antes que Salvador Dalí captando luces en movimiento. Es por ello que tomar una buena fotografía nocturna tiene sus trucos. ¿Quieres aprenderlos?
La palabra fotografía nos informa de la importancia vital que tiene la luz para dicho arte. Por eso quería dedicarle un artículo a la fotografía en condiciones escasas de luz. En otros artículos hablaré de la fotografía estelar y la astrofotografía, pero hay otros muchos momentos en los que la falta de luz nos puede aportar imágenes muy interesantes.
Condiciones de luz cambiantes:
La foto que abre este artículo es una de ellas. Gran angular, noche cerrada, trípode, cable disparador, y en este caso en concreto condiciones de luz que cambian rápidamente: de la mayor oscuridad a la explosión luminosa de unos fuegos artificiales. Es una de las situaciones más difíciles en las que manejar la cámara, ya que hay que hacerlo en modo manual y fijar el valor «f» del diafragma que vamos a utilizar antes incluso de que sepamos cuánta luz tendremos en el ambiente. También hay que tener en cuenta que podemos exponer durante unos segundos, pero no demasiado, para observar las trazas de los fuegos artificiales sin tener una imagen demasiado expuesta, quemada o incluso borrosa.
La primera idea como fotógrafo sería: «si hay poca luz, abramos el diafragma al máximo». El diafragma actúa de la misma manera que el iris de un ojo humano. A mayor diámetro de abertura mayor cantidad de luz llega a la retina / sensor. Pero en el caso de los fuegos artificiales (y de la iluminación nocturna en las ciudades) es mejor cerrar un poco el diafragma para que las luces aparezcan en la imagen definidas (e incluso con forma de estrella) y no difuminadas o como «manchurrones» de luz.
Si cerramos el diafragma tendremos que aumentar el tiempo de exposición o subir el ISO. Subir el ISO puede causar ruido en la imagen, sobre todo si estamos utilizando (como es mi caso) camaras antiguas (mi Nikon d3100 no maneja los ISOs altos muy bien que digamos). Así que tenemos que encontrar el equilibrio perfecto entre ISO, exposición y diafragma.
Fotografía con muy poca luz:
En otras ocasiones podemos encontrarnos casi completamente a oscuras. Es en estos momentos cuando tener un objetivo luminoso puede marcar la diferencia. Se suele llamar objetivos luminosos a aquellos que pueden llegar a valores de apertura de diafragma muy bajos, normalmente valores de f/2.8 e incluso menores. Que no os despiste este dato: a menor valor «f» de diafragma mayor es la apertura del «iris» de la cámara.
Esta es la situación con la que nos encontramos la semana pasada al visitar una de las minas de sal más conocidas del continente europeo, las minas de sal de Wieliczka, en Polonia. Las minas son famosas por albergar una «catedral de sal» en su interior, una iglesia en la que todo está tallado en sal. La imagen anterior es lo que encontró mi cámara antes de ajustar manualmente los parámetros. En el caso concreto de esta excursión a Wieliczka sabía que lo que me interesaba era la arquitectura, la escenografía….. las partes quietas e inmóviles del escenario, es decir, los objetos tallados en sal. Por ello pude permitirme el lujo de abrir el diafragma a tope, bajar un poquito el ISO para evitar ruido en la imagen y subir a varios segundos el tiempo de exposición. No me importaba que las personas que visitaban la «catedral de sal» salieran movidas, borrosas… como imágenes fantasmagóricas. Yo quería fotografiar las estatuas y objetos y que mi cámara captara la luz suficiente para observarlos bien. Por ello, después de ajustar dichos parámetros en la cámara la fotografía quedó de esta manera:
E incluso logré fotografiar un lago interior (lago salado, por supuesto) que estaba en penumbra:
Como os decía anteriormente, un objetivo luminoso ayuda. Normalmente los objetivos utilizados en fotografía nocturna suelen ser de focal corta, es decir, gran angulares. Objetivos de pocos milímetros y un diafragma muy bajo. Son pesados, pero al ser de focal corta no producen trepidación, las imágenes no salen borrosas. Por eso son utilizados para fotografiar (y filmar) de noche, para astrofotografía, etc. Los objetivos luminosos son caros, pero hay algunas marcas «asequibles» y es bueno invertir dinero en ellos si nos gusta este tipo de fotografía.
Pero hay otros momentos que los objetivos luminosos se nos quedan «cortos». Y nunca mejor dicho…
Una pincelada de astrofotografía
Llevo persiguiendo una fotografía desde hace un par de años y por fin, después de tanto tiempo, hace un par de semanas conseguí una imagen que me gustó:
¿Quién no ha soñado con «capturar» la luna? Para esta imagen tuve que utilizar un objetivo telezoom menos luminoso. No es que el mercado no nos ofrezca focales largas y luminosas…. es que su precio se dispara. Pero por fin, después de tantos meses de pruebas, ensayos y errores, el telezoom me permitió captar esta imagen de la luna llena. Alguno de vosotros ya habrá atado cabos: «hace un par de semanas….. luna llena…..». Si, esta foto fue tomada la misma noche que se produjo el eclipse de luna llena. No solo pude tomar la imagen anterior de la luna, sino que fui capaz de levantarme a las 4 de la mañana para buscar una buena posición desde la que inmortalizar el eclipse lunar:
Por desgracia esta fotografía no salió como yo quería, en parte porque con «la torrija» que llevaba encima (madrugón a las 4 am, termo de te calentito para soportar temperaturas bajo cero…) utilicé los mismos parámetros que había utilizado horas antes para fotografiar la luna llena. Mi cerebro no fue capaz de asimilar que eran situaciones diferentes: una era disparar contra un objeto luminoso en plena noche y la otra era disparar contra una pelota oscura que apenas se veía.
Esta es la mejor imagen que he podido obtener del eclipse lunar que no volverá a repetirse hasta dentro de……. buf…. ni lo se. Ya os digo que mi cerebro fue incapaz de procesar la información a la velocidad suficiente cómo para darse cuenta del fallo. Solo al día siguiente, revisando las imágenes en el ordenador, comprendí el fallo garrafal que había cometido. Bueno…. la próxima vez (dentro de 600 años) saldrá mejor.
Disfrutar de la fotografía nocturna
Objetivos angulares luminosos, teleobjetivos….. lo importante es saber que en condiciones escasas de luz aún tenemos la posibilidad de fotografiar si sabemos cómo funciona una cámara y en que procesos físicos se basa el arte de la fotografía. El caso es divertirse con el equipo que tenemos y experimentar con él a ver que podemos obtener.
Dos imágenes de la misma localización cierran este post. En la primera hemos conseguido que las farolas que iluminan las calles aparezcan como estrellas en lugar de como manchas indefinidas.
En la segunda imagen he querido obtener algo más plástico: una exposición de varios segundos no afecta a cómo se verán en la imagen edificios y demás objetos estáticos, mientras que convierte el paso de un autobús urbano por delante de la cámara en unos trazos luminosos que aportan a la imagen cierto toque artístico.
Un abrazo para tod@s y feliz comienzo de semana.
Cómo me gusta la fotografía nocturna. Es uno de esos placeres solitarios y privados, y no piense usté mal…
También se puede hacer en compañía…. a mi siempre me acompaña mi trípode, y no piense usted mal….